<p>La <a href="http://americanpregnancy.org/pregnancy-complications/placenta-accreta/" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="externalLink" data-ordinal="1">placenta acreta</a> sucede cuando tu placenta se adhiere al útero de forma muy profunda, de modo que penetra o atraviesa el músculo uterino. La placenta acreta y sus variantes (increta y percreta) se consideran un <a href="https://www.aboutespanol.com/salud-4147627" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="internalLink" data-ordinal="2">embarazo de alto riesgo</a> y puedes sufrir hemorragia severa durante el parto, requerir una histerectomía o tener complicaciones adicionales. Si la condición se diagnostica durante el control prenatal, el nacimiento suele darse por cesárea y es probable que tengas un parto prematuro.</p><h3><strong>¿Por qué sucede la placenta acreta?</strong></h3><p>La placenta es el órgano encargado de transmitir nutrientes y oxígeno al bebé. En un embarazo normal, tu placenta se adhiere a la capa superficial de tu pared uterina, llamada decidua. Allí establece vías sanguíneas que se conectan al cuerpo de la madre y se desarrolla a lo largo del embarazo.</p><p>Justo después del nacimiento de tu bebé, la placenta se desprende de la pared del útero y tu médico la extrae. Sin embargo, en el caso de la placenta acreta, esta se adhiere de forma tan profunda que <strong>no se desprende después del parto</strong>.</p><p>Según la severidad y profundidad de la adhesión, la condición se clasifica en tres categorías:</p><ul><li> <strong>Placenta acreta.</strong> Se adhiere de forma profunda pero no penetra el músculo uterino.</li><li> <strong>Placenta increta.</strong> Mayor profundidad de la adhesión y sí penetra el músculo uterino.</li><li> <strong>Placenta percreta.</strong> La placenta atraviesa el músculo uterino y se adhiere a otros órganos cercanos, como la vejiga o intestinos.</li></ul><h3><strong>Causas</strong></h3><p>La placenta acreta sucede en uno de cada 533 embarazos, según el <a href="https://www.acog.org/Resources-And-Publications/Committee-Opinions/Committee-on-Obstetric-Practice/Placenta-Accreta" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="externalLink" data-ordinal="3">Colegio Americano de Ginecólogos y Obstetras</a> (ACOG). Aunque en algunos casos se desconoce la causa, sí se sabe que las cicatrices o lesiones en la pared uterina favorecen el desarrollo de la condición. Estos factores también te hacen más propensa a tener una placenta acreta:</p><ul><li>Si la placenta se adhiere en la parte baja del útero, donde la capa decidua de la pared uterina es más delgada.</li><li>Cesáreas previas. El riesgo es mayor entre más cesáreas hayas tenido anteriormente.</li><li>Cirugías uterinas, como la remoción de fibromas.</li><li>Legrados previos. Este procedimiento consiste en raspar las paredes del útero para extraer tejido, ya sea para remover restos de un aborto espontáneo o provocado, o recolectar muestras para análisis y diagnóstico de enfermedades. El legrado puede causar cicatrices en el revestimiento uterino.</li><li>Embarazos previos. El riesgo de anormalidades de la placenta aumenta con la cantidad de embarazos previos.</li><li>Placenta previa</li><li><a href="https://www.aboutespanol.com/embarazo-despues-de-los-40-es-un-embarazo-de-alto-riesgo-1176640" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="internalLink" data-ordinal="4">Embarazo después de los 35 años de edad</a></li><li>Fumado</li></ul><h3><strong>Diagnóstico y síntomas</strong></h3><p>Aunque no se realiza una prueba específica para diagnosticar la placenta acreta, la condición puede encontrarse por medio de un <a href="https://www.aboutespanol.com/ultrasonido-en-el-embarazo-que-es-y-por-que-lo-necesitas-1176751" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="internalLink" data-ordinal="5">ultrasonido</a> de rutina, como el ultrasonido anatómico a la mitad del embarazo. Si tienes alguno de los factores que te hacen más propensa a sufrir la condición debes comunicárselo a tu médico, para que pueda evaluar la placenta con más detenimiento. De ser necesario, una <a href="https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/003335.htm" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="externalLink" data-ordinal="6">prueba de resonancia magnética</a> puede diagnosticar la placenta acreta con mayor precisión. </p><p>Los síntomas indicativos de la placenta acreta se pueden presentar durante el tercer trimestre, cuando puede causar <a href="https://www.aboutespanol.com/sangrado-en-el-embarazo-causas-riesgos-y-cuando-es-una-emergencia-1176649" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="internalLink" data-ordinal="7">sangrado vaginal en el embarazo</a>, en cuyo caso debes contactar a tu médico. Si el sangrado es excesivo, dirígete de inmediato al centro hospitalario.</p><h3><strong>Riesgos para el bebé</strong></h3><p>El <a href="https://www.aboutespanol.com/que-es-el-control-prenatal-y-por-que-es-importante-1176496" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="internalLink" data-ordinal="8">control prenatal</a> y cuidados en el embarazo pueden minimizar los riesgos de la placenta acreta para tu bebé. Sin embargo, según la gravedad y profundidad de la adherencia, podría llevar a:</p><ul><li> Nacimiento prematuro, con sus posibles complicaciones.</li><li>Parto por cesárea</li><li>Muerte fetal si la condición no se trata a tiempo.</li></ul><h3><strong>Riesgos para la madre</strong></h3><ul><li>Hemorragia durante el alumbramiento. En promedio, la madre puede perder entre 3.000 y 5.000 ml de sangre durante el parto como producto de la placenta acreta, y un 90% de las madres requieren transfusiones sanguíneas.</li><li>Necesidad de <a href="https://medlineplus.gov/spanish/hysterectomy.html" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="externalLink" data-ordinal="9">histerectomía</a>, que es la remoción de tu útero. Si esto sucede, pierdes la habilidad de tener otro embarazo.</li><li>En casos de placenta percreta, puede haber daño a otros órganos adyacentes y estos pueden requerir cirugías adicionales.</li><li>Muerte materna</li></ul><h3><strong>Tratamiento de la placenta acreta</strong></h3><p>La clave en el tratamiento de la placenta acreta es el conocimiento y la preparación. Si se diagnostica durante el embarazo, tú y tu médico tienen la oportunidad de planificar una cesárea, contar con el equipo de apoyo necesario para contrarrestar una hemorragia y evaluar tus preferencias en cuanto a histerectomía e intervenciones adicionales.</p><p>Estas son las recomendaciones de ACOG para el manejo de la placenta acreta:</p><ul><li>Prolongar el embarazo lo más posible. El objetivo es darle tiempo al bebé de madurar y estar mejor preparado para la vida fuera del útero. De ser necesario, tu médico te puede mandar reposo absoluto y administrarte medicamentos para madurar los pulmones del bebé. El momento ideal para el nacimiento depende de tu caso específico, sin embargo, los nacimientos a partir de las 34 semanas de embarazo en pacientes estables tienen resultados óptimos, según ACOG.</li><li>Planificar el nacimiento. El método recomendado para el nacimiento es la cesárea, que debe realizarse antes de que la madre entre en trabajo de parto.</li><li>El nacimiento debe realizarse en un centro médico que tenga el personal y la capacidad para atender procedimientos de alto riesgo, así como un banco de sangre bien abastecido. El equipo médico debe ser transdisciplinario e incluir especialistas en anestesia, obstetricia, cirugía pélvica, medicina materno-fetal, neonatología, urología, radiología, hematología y cuidados intensivos.</li><li>La recomendación es realizar la histerectomía justo después del nacimiento del bebé, manteniendo la placenta intacta dentro del útero para reducir la hemorragia.</li><li>Si no deseas que se realice la histerectomía, tu médico puede evaluar si la placenta logra desprenderse por su cuenta o removerla, dependiendo del tipo y grado de adherencia. Si se realiza este procedimiento, aún corres el riesgo de sufrir hemorragias, requerir una histerectomía posterior o tratamientos adicionales, perder tu fertilidad y tener embarazos complicados en un futuro. </li></ul><p><sub><strong>Fuentes:</strong><br/>American College of Gynecologists and Obstetricians. <a href="https://www.acog.org/Resources-And-Publications/Committee-Opinions/Committee-on-Obstetric-Practice/Placenta-Accreta" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="externalLink" data-ordinal="10">Committee Opinion: Placenta Accreta</a>. Accedida 28 de febrero del 2016.<br/>Cabero Roura, Luis, <em>et al.</em> Obstetricia y Medicina Materno-Fetal. Editorial Médica Panamericana (2007). pp. 614-616.<br/>Eller, AG., <em>et al</em>. <a href="http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/j.1471-0528.2008.02037.x/full" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="externalLink" data-ordinal="11">Optimal Management Strategies for Placenta Accreta</a>. En: BJOG: An International Journal of Obstetrics and Gynaecology. 2009; 116:648-654. Accedida en línea el 28 de febrero del 2016.<br/>Silver, Robert M., <em>et al.</em> <a href="http://www.ajog.org/article/S0002-9378%2814%2902248-0/fulltext" data-component="link" data-source="inlineLink" data-type="externalLink" data-ordinal="12">Center of excellence for placenta accreta</a>. En: American Journal of Obstetrics and Gynecology. 2015; 212(5):561-568. Accedido en línea el 28 de febrero del 2016.</sub></p>